¿Qué me motiva a hacer las cosas?

Cuando alguien me pregunta si hizo algo bien o mal, le pregunto cuál fue su motivación. Yo me pregunto lo mismo y me he llevado muchas sorpresas. Por ejemplo, he hecho cosas buenas para manipular. Entonces en realidad no hice el bien. 

He escuchado gente hacer cosas que podrían verse con malos ojos, como pedir que arresten a su hijo agresor o decirle que se vaya de la casa. Pero eso era lo que se tenía que hacer para protegerse, y de paso era lo que el hijo necesitaba para tocar fondo y empezar a cambiar. Entonces resultó ser algo bueno. He llegado a sospechar que hay padres que cuando defienden a sus hijos vehemente de un abuso, aunque ellos mismos sean abusivos y negligentes, en realidad lo hacen pensando en sí mismos porque sus hijos se han convertido en extensiones o sucursales de su ego. ¿Será un acto de amor? 

De pequeño padecía mucho de dolor de pies y mi mamá me los frotaba con gasolina. Ahora se lamenta cuando ve tanto analgésico y considera que ese tratamiento no era tan efectivo y hasta podía haber sido peligroso. Pero era con lo que contaba y actúo con muy buenas intenciones, aunque ahora ella piense que era algo malo. 

Todos en el fondo queremos vernos como gente muy correcta y algunos no soportan la idea de verse con honestidad, porque esa convicción podría venírseles al suelo. Les despertaría culpabilidad y se verían frente al dilema de permanecer en su acostumbrado y cómodo egoísmo o cambiar. Un Cuarto Paso les resultaría una bofetada. 

La verdad me sana y me he tomado en serio lo de ser honesto conmigo mismo. Ahora analizo todo desde el punto de vista no solo de las  acciones sino de las intenciones. Analicemos nuestros motivos con profundidad y sinceridad y así podremos valorar correctamente nuestras actitudes. Y así descubriremos si somos coherentes con los principios que aprendemos en el Programa y no los estamos usando como máscara de nuestros defectos para tranquilizar la conciencia. Un examen de ese tipo también puede resultar muy liberador porque podríamos descubrir que muchas cosas malas no lo eran o que las hicimos por el desconocimiento de cómo hacerlas bien.